La propiedad intelectual (P.I.) tiene que ver con las creaciones de la mente: las invenciones, las obras literarias y artísticas, los símbolos, los nombres, las imágenes y los dibujos y modelos utilizados en el comercio.
La propiedad intelectual se divide en dos categorías: la propiedad industrial, que incluye las invenciones, patentes, marcas, dibujos y modelos industriales e indicaciones geográficas de procedencia; y el derecho de autor, que abarca las obras literarias y artísticas, tales como las novelas, los poemas y las obras de teatro, las películas, las obras musicales, las obras de arte, tales como los dibujos, pinturas, fotografías y esculturas, y los diseños arquitectónicos. Los derechos relacionados con el derecho de autor son los derechos de los artistas intérpretes y ejecutantes sobre sus interpretaciones y ejecuciones, los derechos de los productores de fonogramas sobre sus grabaciones y los derechos de los organismos de radiodifusión sobre sus programas de radio y de televisión.
Derechos de autor: El artículo 11 de la Ley Federal del Derecho del
Autor define a los derechos de autor como el reconocimiento que hace el
Estado a favor de todo creador de obras literarias y artísticas
previstas en el artículo 13 de esta Ley, en virtud del cual otorga su
protección para que el autor goce de prerrogativas y privilegios
exclusivos de carácter personal y patrimonial. Los primeros integran el
llamado derecho moral y los segundos, el patrimonial. Este se refiere a
las obras literarias y artísticas, es decir, se refieren a los derechos
que tienen los artistas sobre sus obras, los derechos de los intérpretes
sobre sus ejecuciones e interpretaciones, los derechos de los autores
de fonogramas sobre sus grabaciones y los derechos de las empresas de
radiodifusión sobre sus programas, tanto de radio como de televisión.
La propiedad intelectual, desde el punto de vista de la tradición continental europea y de buena parte de los países latinoamericanos, supone el reconocimiento de un derecho particular en favor de un autor u otros titulares de derechos, sobre las obras del intelecto humano.